En los últimos días se conoció la noticia de una pareja que en un supermercado de El Calafate se retiraba sin pagar sus productos. Fueron detenidos durante seis horas y afrontan un proceso penal por un poco de carne, queso y pan, entre otros alimentos.
La realidad de quienes visitan el principal destino turístico santacruceño, la “Tierra de Glaciares” maravillados por el escenario natural y la majestuosidad del Parque Nacional “Perito Moreno“, con gran caudal de extranjeros, contrasta con la de un sector de la comunidad con una realidad que no le es ajena a nivel nacional a la canasta básica total (CBT) de $163.539 para no ser considerada pobre y de $72.043 en la canasta básica alimentaria (CBA) para no caer debajo de la línea de indigencia según el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC).
El destino turístico en enero de este año marcó el récord histórico de cantidad de personas que abordaron su vuelo desde el Aeropuerto Internacional “Comandante Armando Tola” de El Calafate, con 50.665 pasajeros según la estadística que elabora la firma London Supply, administradora del aeropuerto, un gran logro para el sector turístico aunque como suele suceder tristemente hay familias que lejos están de usufructuar estos beneficios.
Tal es el caso de una pareja de poco más de 40 años que al no poder abonar los productos alimenticios en la sucursal céntrica de La Anónima optaron por guardarlos entre sus prendas, alertados de la situación el personal de seguridad dio aviso a la policía provincial, siendo requisado el hombre en el lugar y la mujer habiendo dejado los mismos en el sector de los baños pero ambos atrapados infraganti. Ante esto, las fuerzas policiales los trasladó a la Comisaría Seccional Primera en carácter de aprehendidos siendo puestos en libertad luego de seis horas pero con un proceso judicial iniciado.
Frente a ello, es importante entender que hay circunstancias en las que las personas pueden verse obligadas a cometer delitos para sobrevivir en situaciones que le son extremas siendo éste quizás un caso más, triste pero un caso más en nuestro lugar.
Los factores que contribuyen a la pobreza son diversos y complejos, pero algunos incluyen la falta de oportunidades laborales, los altos costos de vida, la inflación galopante y la falta de acceso a la infraestructura básica como vivienda y servicios públicos. Además, claro está, la pandemia de COVID-19 que ha agravado aún más la situación económica de muchas familias que no logran recuperar su nivel adquisitivo en sectores informales de la economía.
El acento debe estar puesto institucionalmente en generar políticas públicas concretas que tiendan a buscar atender las necesidades de las familias en situación de vulnerabilidad social y económica que en veces es empujada incluso a hurtar sus alimentos.
Fuente: Señal Calafate – Santa Cruz Nuestro Lugar
Fotografía: Señal Calafate.
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