Este domingo es la fecha señalada en el calendario en que las y los santacruceños concurramos a las urnas, el intendente riogalleguense y candidato a gobernador de “Construyamos Juntos” cerró su campaña “probándose” un Boxing Club que revivió otras épocas. El legado de “Lupín” y el foco en hacer: “Siempre nos han apuntado con el dedo, pero siempre nos critican por hacer, nunca por no hacer nada” exclamó ante un multitudinario y fervoroso público.
Durante la jornada de ayer se llevaron adelante los distintos cierres de campaña de los espacios políticos que este domingo dirimen en las urnas el futuro de la provincia con el electorado como protagonista. Son momentos decisivos para “encantar” a los indecisos de última hora, buscando torcer la balanza en una elección que se estima se defina por detalles, en la que los “bunkers” se trasnochará hasta conocer los resultados definitivos que unjan al nuevo gobernador.
En ese marco, Pablo Grasso que ya se mostraba fuerte debutando en la categoría a gobernador y un “piso” importante en la última elección en la que participó cosechando 19.497 votos sólo en Río Gallegos, cerró su campaña con un mítico Boxing Club que revivió épocas doradas del Frente para la Victoria Santacruceña.
Es que la figura de Néstor Kirchner estuvo presente como hace tiempo no sucedía en un acto político, videoclip rememorando las obras de su paso por la intendencia, el legado histórico para Santa Cruz y la semblanza de convocatorias que en la retina de las y los santacruceños apunta bien alto con la épica y mística que lo posiciona cerca del objetivo del desembarco a la gobernación.
El despliegue territorial de su espacio político fue clave, así como la gestión local con una fuerte apuesta al orden de la administración, la revalorización de espacios públicos, inversión en obra pública y espectáculos populares para atraer a visitantes a “la capital de todos los santacruceños” enmarcó la estrategia de “Si lo hicimos en Río Gallegos lo vamos a poder hacer en toda la Provincia”.
Desde el escenario en el que fue el último orador del acto se mostró seguro y efusivo para con los presentes, “Yo estoy parado acá porque vengo de ahí muchos me vieron crecer y me acompañaron. Son parte de Pablo Grasso y todos vimos una ciudad grande, una provincia justa y un país federal. Es el camino que hay que seguir”.
“Seguiremos trabajando por una mejor Santa Cruz. Construyamos juntos educación, trabajo, ciudadanía y lo que soñaron nuestros viejos. Viva lo más valioso de la provincia que es la clase trabajadora, los vecinos que siguen confiando en una Santa Cruz mejor posible. Viva Perón, Néstor, Cristina y viva Santa Cruz” cerró en un discurso encendido ante un multitudinario Boxing Club que vitoreaba a viva voz por la gobernación de Grasso: horas finales y el colectivo imaginario que pone énfasis en su figura.
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